En 2002 se genera el segundo hecho considerado un milagro, necesario para proceder a la canonización de la religiosa helvética, cuando la joven Mirna Jazime Correa, de Cartagena, recobró la entera salud, al estar desahuciada tras complicaciones al sufrir una neumonía atípica.
Finalmente, la Beata Bernarda Bütler fue inscrita en el catálogo de los santos el 12 de octubre de 2008, en la ciudad del Vaticano por Benedicto XVI.